HISTORIA DE UN CORTO

Era febrero de 2019 y viajábamos por primera vez a Sudán en busca de tiburones martillo. Teníamos claro el objetivo; nos habíamos formado a conciencia y hasta habíamos comprado una cámara nueva para afrontar con éxito las grabaciones más profundas con los escualos. Grabar tiburones martillo era el principal cometido de nuestra expedición y en ello centraríamos nuestros esfuerzos las siguientes dos semanas. Como es lógico, para ambientar, grabaríamos también en los puntos de buceo clásicos del Mar Rojo sudanés: recorreríamos sus inmaculados arrecifes, nos sumergiríamos entre los restos que los experimentos del Comandante Cousteau dejaron en sus fondos y visitaríamos, como no, el magnífico pecio Umbria.

Aunque durante esa primera expedición la suerte no estuvo especialmente de nuestro lado, pudimos disfrutar y grabar todo lo que habíamos planificado. Así que, felices y satisfechos llegamos a Port Sudán para realizar la última jornada de grabación: el pecio Umbria.
El Umbria es un carguero italiano que se hundió frente a la costa de Port Sudán en plena II Guerra Mundial. Sus 150 metros de eslora albergan 5 bodegas repletas de bombas, explosivos, detonadores, cientos de botellas de vino y hasta 3 coches Fiat Lungo. Su espectacular estado de conservación y el incalculable valor de su carga lo convierten en uno de los mejores pecios buceables del mundo.

Pero no hubo que esperar a bucear en él para que este gigante sumergido nos dejara sin palabras porque en los días en los que el mar está en calma puede verse su majestuosa silueta desde la superficie. Y es que el Umbria descansa a tan solo unos metros de profundidad. Tan accesible que puede visitarse incluso en apnea.
La apasionante historia de su hundimiento terminó de cautivarnos y todos coincidimos en que allí hicimos algunas de las mejores inmersiones del viaje.

Volvimos a Madrid entusiasmados y con horas de material en nuestros discos duros. El siguiente paso era planificar las grabaciones de las entrevistas para poder empezar a montar la estructura del documental cuanto antes.
Hola, soy Carlos León, ¿me estabas buscando?
La grabación de las entrevistas requería una planificación concienzuda puesto que queríamos cubrir gran parte de la geografía española para que los testimonios reflejasen la realidad de nuestros mares y océanos. Así que nos dividimos el trabajo y nos pusimos manos a la obra.
A las dos o tres semanas Dani me llamó desesperado porque no conseguía encontrar un experto en arqueología submarina que pudiese hablarnos del Umbria. Decidí tomarle el relevo en esta tarea y empecé a buscar (con tan poco éxito como él). Hasta que un día me acordé de un libro sobre arqueología submarina que mi hermana me había regalado hacía algunos años.

No tardé en encontrarlo entre mis libros de buceo: “Buceando en el Pasado. Los grandes naufragios de la historia”, de Carlos León Amores. Por suerte el autor era de Madrid, así que me puse a la ardua tarea de tratar de localizarlo. Empecé buscando en internet (quizás podría dar con él a través de la editorial, pensé) pero la primera búsqueda arrojó una grata sorpresa: teníamos un amigo en común en nuestras Redes Sociales. Ninguno de los dos parecía muy activo últimamente en sus perfiles, pero les mandé a ambos un mensaje dispuesta a esperar una semana antes de buscar otra vía de contacto. A los pocos días sonó el teléfono: -“Hola, soy Carlos León, ¿me estabas buscando?”.
Carlos León es Doctor en Prehistoria y Arqueología, además de buzo profesional. Ha dirigido numerosas prospecciones y excavaciones arqueológicas y dirigido importantes proyectos museográficos. Actualmente coordina el título de Especialización en Patrimonio Marítimo Cultural Iberoamericano de la Universidad de Alcalá y ejerce de comisario de diversas exposiciones.
Hablamos durante un buen rato explicándole en qué consistía el proyecto y no dudó ni un minuto en ayudarnos. Así que quedamos en que le pondría en contacto con el director y concretaríamos una fecha para la grabación.
Un escenario inmejorable
Una vez encontrado el experto teníamos que encontrar una localización que estuviera a la altura. Buscar un sitio con cierto ambiente náutico en Madrid (y con el museo naval completamente desmantelado por obras) no parecía tarea fácil. Repasamos mentalmente todos y cada uno de los rincones de la ciudad que pudieran servir para ambientar la entrevista: museos, salas de exposición, clubes de buceo, escuelas de náutica… ninguno parecía reunir las condiciones para nuestro rodaje. Después de darle mil vueltas recordé que hacía unas semanas había trabajado en el reportaje de una exposición sobre la primera vuelta al mundo. Contacté con el periodista que lo hizo, Gabi Cruz, que me contó que la exposición se encontraba en el Instituto Geográfico Nacional y me dio el contacto de Marcos Francisco Pavo, jefe del Área del Registro Central de Cartografía. A los pocos días recibí la respuesta del IGN: nos ofrecían sus instalaciones para grabar la entrevista.

El Instituto Geográfico Nacional albergaba aquellos días la exposición «Los mapas y la primera vuelta al mundo», con motivo de la celebración de los 500 años del comienzo de la primera circunnavegación del mundo, la mayor gesta exploradora de toda la historia (incluso superior, en su contexto, a la llegada del hombre a la luna). La exposición mostraba un recorrido cartográfico por los aspectos más interesantes del viaje: sus antecedentes, preparativos, desarrollo y consecuencias. Un escenario inmejorable para nuestra historia.

No puedo dejar de destacar la amabilidad y el buen hacer con los que el equipo del IGN nos atendieron aquella mañana. Su buena disposición, unida a la profesionalidad de Carlos León, hicieron que el resultado fuera mejor de lo imaginado. A todos ellos les estamos enormemente agradecidos.
Por cierto, la exposición está ahora mismo de gira en Ostende (Bégica), pero para los que tengan curiosidad sobre el tema pueden visitar la exposición virtual o consultar el catálogo de la exposición. No os la perdáis si tenéis ocasión, porque la selección de mapas constituyen una maravillosa lección de historia.
Y los meses de confinamiento hicieron el resto
La de Carlos León fue la última entrevista que pudimos hacer antes de que la crisis sanitaria por la COVID-19 trastocara los planes de todos. Siete días después de nuestro rodaje en el Instituto Geográfico Nacional se decretaba en España el Estado de Alarma.
Encerrados en casa, con varias entrevistas aún por grabar y mucho tiempo libre por delante, el único bloque en el que podíamos trabajar era el dedicado al pecio Umbría. Así que nos pusimos manos a la obra. Poco a poco la narración fue cobrando vida propia y lo que en principio iba a ser un bloque de nuestro documental Rumbo al Pasado terminó por convertirse en una pieza independiente por méritos propios: Historia de un Pecio. Una pequeña joya de la que nos sentimos más que orgullosos. Ahora lo vemos claro: el hundimiento del Umbria era una historia que merecía ser contada en otro momento.
Historia de un Pecio

Y por fin la situación sanitaria nos ha dado un respiro y podemos celebrar su estreno presencial en Madrid. Será esta tarde a las 19h en el Centro Cultural Casa de Vacas (Parque del Retiro) en una proyección doble que hemos preparado con motivo del día de los océanos. Esperamos que disfrutéis buceando con nosotros en este trocito de la historia.
¡Os esperamos!
Rumbo al Pasado + Historia de un Pecio
Centro Cultural Casa de Vacas (Parque del Retiro)
7 de junio a las 19h
Entrada libre hasta completar el aforo.